Casa de campo Bailey McCarthy Texas
Estantería
La pareja terminó su mini cambio de imagen trayendo algunos elementos básicos de la cocina del campo: una mesa de granja que también funciona como una isla; una lámpara de latón que desarrollará pátina con el tiempo; cortinas florales en blanco y negro; y estantes abiertos para exhibir su colección de peltre antiguo y un bordado favorito.
Comedor
Inspirado por el exuberante paisaje justo afuera de las enormes ventanas (¡que fueron rescatadas de una antigua estación de tren!), Bailey llenó la habitación con elementos rústicos de madera y toques de verde. Los dueños anteriores dejaron atrás el candelabro de asta gigante, que le quedaba muy bien a Bailey. A partir de ahí, seleccionó una mesa redonda antigua que había reducido a la madera en bruto para una apariencia más gastada y desgastada. Las sillas de haya, que Bailey había lacado en un tono verde manzana, hacen una yuxtaposición animada con la mesa. También aparecen contra la gran cabina de antigüedades que almacena su colección de tazas de cobre de Moscú y porcelana verde y blanca. Una alfombra oriental de color rosa pálido con sutiles toques de azul cielo y chartreuse completa la mezcla.
Cuarto
Bailey diseñó la habitación, que originalmente era el salón de la casa, alrededor del patrón de Wimberley de su compañía (llamado así por la pequeña ciudad de Texas conocida por sus hermosas flores silvestres). Tapizó la cama pintada de blanco con una tela gráfica de cuadros azules y blancos para complementar las extravagantes sábanas. El papel pintado con un patrón de vetas de madera, una forma fresca de lograr un efecto similar al de las paredes con paneles de madera sin pintar, crea un fondo cálido para la cama fresca. Las cortinas vaporosas con ojales completan el espacio con una dosis de belleza. "Añaden un toque country sin ser totalmente 'abuelas'", dice Bailey. Idea brillante: Un candelabro proporciona suficiente luz para el hábito de lectura nocturna de Bailey sin molestar a su esposo.
Edredones Antiguos
"Como alguien que ha incursionado un poco en la costura, realmente aprecio el arte y la artesanía", dice Bailey sobre sus colchas antiguas.
La familia
"Queremos que nuestra casa sea cómoda y acogedora, sin ser elegante ni exigente", dice Bailey. "Aquí es donde vinimos a relajarnos, reconectarnos y construir recuerdos como familia". En esta foto: Bailey y su esposo Pete posan con su hijo Harry, de 11 meses, su hija Grace, de 3 (¡no soy fan de posar para fotos familiares!), Y su cabra, Calamity Jane.